Bulle mi sangre como el agua
hierve de amor
desborda por los labios.
Riega al mundo de alegría
y yo observo feliz gentes y cosas
Mirarte cual pócima cura mi alma
alivia el dolor
calma todas mis heridas,
le da vida a mis mustias rosas...
Pero pronto se calma y se apacigua
tras apagarse el fuego que la lleva
hirviendo a salir a las alturas.
Incomprensión, ira, melancolía
envenena de amor a los amantes
les pone esposas, cadenas, sucias trampas.
Mi corazón lo sabe y sigue frío
entre la sequedad y el humo,
esquiva las miradas de su dueña.
Texto: Wendy Bernal (W*B Works) (inspirado en un poema de Luis García Martín
Imagen: Auto in the street (W*B Works)
Éste es mi Blog personal dedicado a publicar los textos y fotos que he realizado durante mucho tiempo. Soy una apasionada del arte. Me gusta la literatura, lo que me llevó a estudiar filología hispánica. He trabajado como modelo. Ahora me he introducido de lleno en el mundo de la fotografía. Lo que pretendo conseguir con éste blog es lograr una fusión de textos e imágenes que transmitan sensaciones y que logren emocionar.
lunes, 21 de noviembre de 2016
domingo, 20 de noviembre de 2016
Sweet Heart

Corté de raíz todo aquello
que me pasaba.
Cometí miles de errores
y en tanto que me equivocaba,
iba arrancando los pétalos
de las más hermosas flores
mientras me preguntaba a mi misma
si me quería o no me quería.

Soñé que cumplía un montón de sueños
pero me desperté de repente
empapada de realidad,
sobre una cama vacía
en la misma habitación
lúgubre y fría
de la que intenté escapar
en más de una ocasión...

Sin más opción que ser fuerte
decidí afrontar la vida
sin aferrarme a nada...
porque lo único que necesito
late cada día más intensamente
aquí dentro de mi pecho.
Sabe que algo grande le espera
y se está preparando para sentirlo...
Imagenes: Sofía Álvaréz (Sofía Santaclara)
Modelo y textos: Wendy Bernal (W*B Works)
Sentir o morir
Me daba miedo sentir
y muchas veces temí
nunca poder hacerlo...
Iba precavida por la vida
lamentando un nose qué
que me impedía ser yo misma.
Hasta que descubrí
que uno no puede reprimir
algo tan intenso y tan real
como el fuego en el pecho
y la piel de gallina
y las lágrimas que corren
por el cuerpo hasta el suelo.
El dolor apretaba fuerte,
pero sin ese sufrimiento
jamás habría descubierto
todos estos sentimientos;
y no habría aprendido
a fluir con ellos en libertad
hasta descubrir,
otro nivel de sensibilidad...
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